Se acerca el día de tu boda e irremediablemente el día de ir a la tienda a hacerte con el traje de novio que mejor se adapte a tu estilo y tu personalidad. Uno de los elementos en los que podrás innovar o, al menos, introducir algún toque de color, es en los chalecos de novio, un complemento que seguro marcará la diferencia. Vamos a ver qué posibilidades existen.
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A la hora de elegir entre unos chalecos de novio u otros, debes tener en cuenta algunas cosas. En cuanto al color, si por ejemplo la decoración de tu boda es de algún tono predominante, puedes elegir un chaleco a juego con él, por qué no? Normalmente lo habitual es que sea en colores más bien claros o neutros, pero por qué no atreverse con un chaleco rojo, o naranja, a juego o contraste con el resto del enlace. Otra posibilidad es combinar las tonalidades del chaleco con el ramo de tu chica, o sus zapatos, daréis un toque muy divertido a vuestra boda. Y si ya lo combinas con las diferentes posibilidades que existen de gemelos para el novio, éxito asegurado.
Si, por ejemplo, tu atuendo es más clásico, los chalecos de novio negros son la mejor opción, o grises con traje oscuro y camisa blanca. Elegancia y sobriedad aseguradas. Los novios más originales o atrevidos pueden ponerse un chaleco estampado o incluso con textura. No son fáciles de llevar pero si aciertas, triunfas seguro.
Cómo llevar los chalecos de novio
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Normalmente, los chalecos de novio pueden ir rectos o cruzados, y llevar tres botones o alguno más. Si el chaqué es es gris el chaleco deberá ser también gris. También se tiene en cuenta a la hora de escoger esta prenda el tono de piel del novio, para que el chaleco lo favorezca al máximo. Si por ejemplo tienes la piel más bien clara, te sentarán bien los chalecos en colores grises, azules oscuros, rojos, dorados o burdeos. Si la tonalidad es más bien media, puede quedarte genial colores como el arena, el verde pistacho o en azul claro. Si estás moreno o tienes la piel oscura, te va a favorecer muchísimo tonos fresas, amarillos, rosas…
